Habrás leído cientos de veces en este blog las palabras “déficit de actividad muscular” o hiperactividad en diversas patologías o alteraciones provocadas por el dolor.
Es posible que hayamos dado por hecho que este concepto ya lo conocías… Pero puede darse el caso que todavía no lo tengas claro y no te hayas atrevido nunca a preguntarlo.
En el post de hoy vas a aclarar el concepto de déficit de activación y vas a aprender 3 maneras de medirlo con electromiografía de superficie.
¿Qué es un déficit de activación?
La definición no puede ser más sencilla. Se denomina déficit de activación muscular a cuando un músculo activa MENOS de lo que debería para realizar un movimiento.
Este déficit puede causar diferentes problemas como:
- ❌ Un déficit de fuerza articular.
- ❌ Menor o peor rango de movimiento.
- ❌ Menor estabilidad articular.
- ❌ Más riesgo de lesión o recaída.
Pero…¿Cómo puedes determinar que un músculo está activando menos de lo que debería? Existen varias maneras y casi todas se asocian a la electromiografía de superficie.
Si sigues conmigo descubrirás 3 formas claras de detectarlo si dispones de un electromiógrafo.
Cruza el rango de movimiento con la actividad muscular.
Mira este ejemplo: El hombro izquierdo visualmente tiene menor movilidad en la flexión.
Si también mides la actividad muscular puedes comprobar que deltoides anterior izquierdo activa mucho menos que deltoides anterior derecho.
Por lo tanto hay un déficit de activación en el deltoides izquierdo.
Cruza la fuerza articular con la actividad muscular.
Este ejemplo también es muy sencillo de entender.
En una prueba de flexión de rodilla isométrica resistida manualmente, el paciente presenta menos fuerza en la pierna izquierda, que es la lesionada (6 sobre 10), que en su contralateral.
Además, cuando cruzas la fuerza con electromiografía detectas que el bíceps femoral y el semitendinoso izquierdo activan menos que sus contralaterales.
Por lo tanto existe un déficit de activación del bíceps femoral y semitendinoso izquierdos.
Compara el lado lesionado con el sano.
Mira esta sentadilla.
A priori no se aprecia diferencia pero si te muestro los resultados del vasto medial izquierdo y derecho lo verás claro.
El Vasto interno izquierdo se activa muy por debajo del Vasto interno derecho. Acabas de detectar un déficit de activación que puede poner en riesgo la recuperación de tu paciente, ya que este movimiento estará compensado por otros músculos o estructuras que quizás no te interesen trabajar.
¿Cómo invertir un problema de déficit de activación?
Si detectas un déficit de actividad muscular tu objetivo clínico será tan sencillo como:
AUMENTAR LA ACTIVIDAD MUSCULAR con el objetivo de:
- ✅ Aumentar la fuerza articular o el rendimiento.
- ✅ Mejorar la movilidad.
- ✅ Hipertrofiar un músculo.
- ✅ Mejorar la estabilidad articular.
La electromiografía es un método validado para medir de forma objetiva déficits musculares, guiar las decisiones del tratamiento y evaluar su eficacia.