El exceso de tono muscular en reposo en la región cervical puede ser un indicador de diversas condiciones subyacentes que afectan la calidad de vida y la movilidad de los pacientes. 

Recuerda que un exceso de tono se define como el exceso de actividad muscular de un músculo en reposo. 

Comprender las causas comunes de este fenómeno no solo enriquece los informes fisioterapéuticos, sino que también guía en la elección de estrategias de tratamiento más efectivas. 

En este post vas a descubrir seis causas comunes que todo fisioterapeuta debe considerar.

PD: Estos son los músculos que puedes evaluar con mDurance de la región cervical.

• – Trapecio superior.
• – ECOM.
• – Escaleno.
• – Esplenios.
• – Semispinalis Capitis.

1. Estrés y ansiedad

El estrés crónico y la ansiedad pueden llevar a una tensión constante en los músculos del cuello. La activación del sistema nervioso simpático en respuesta al estrés provoca que los músculos permanezcan en un estado de contracción, incluso en reposo.

Mecanismo fisiológico: Bajo estrés o ansiedad, el sistema nervioso central emite órdenes que incrementan la tensión en ciertos grupos musculares. El cuello, al ser una zona que naturalmente sostiene la cabeza y por ende, responde a la dirección de la atención y alerta, es especialmente susceptible a acumular tensión.

Músculos comúnmente afectados:

• – Esternocleidomastoideo (ECOM): Este músculo del cuello, puede contraerse intensamente bajo estrés, causando rigidez y limitando el rango de movimiento, lo que a veces resulta en dolor y malestar significativos.
• – Trapecios Superiores: Son también comúnmente afectados por el estrés. La tensión en los trapecios superiores puede conducir a dolores de cabeza tensionales y rigidez en el cuello y los hombros.

Caso de estudio: Imagina a una persona que trabaja en un ambiente de oficina de alta presión. Pasa largas horas frente a su ordenador, enfrentándose a deadlines ajustados y demandas constantes. A medida que el estrés de su trabajo aumenta, inconscientemente tensa su cuello y hombros en respuesta a su ansiedad. Esta tensión se manifiesta especialmente en sus músculos ECOM y trapecios superiores, llevándola a experimentar dolores de cabeza frecuentes y una rigidez dolorosa en el cuello al final del día.

2. Posturas ineficientes

Pasar mucho tiempo en ciertas posiciones, como encorvado sobre un escritorio, puede causar que los músculos cervicales trabajen más para sostener la cabeza. Esta sobrecarga constante lleva a un aumento del tono muscular en reposo. 

Mecanismo fisiológico: Cuando una persona adopta una postura inadecuada, como encorvarse o extender el cuello hacia adelante (también conocido como «text neck»), los músculos del cuello deben activarse más para sostener la cabeza. Cuando la columna cervical no está alineada verticalmente sobre la columna, la carga de trabajo para los músculos cervicales aumenta significativamente.

Músculos afectados:

• – ECOM: Este músculo puede volverse tenso cuando constantemente tiene que contrarrestar el peso de la cabeza inclinada hacia adelante.
• – Músculos suboccipitales: pueden estar excesivamente activos debido a la postura prolongada de la cabeza hacia adelante, contribuyendo a dolores de cabeza y rigidez cervical.
• – Trapecios superiores: Estos también son propensos a la sobrecarga y el dolor debido a la necesidad de compensar la postura inadecuada, llevando a una elevación crónica de los hombros y una rigidez general en los hombros y el cuello.

Caso de estudio: Imagina a Juan, un programador de software que pasa más de 8 horas al día sentado en su escritorio, a menudo inclinándose hacia su monitor o mirando hacia abajo en su teléfono móvil. A lo largo del tiempo, Juan desarrolla dolor crónico en el cuello y los hombros. La evaluación revela un exceso de tono en sus músculos ECOM y trapecios superiores, directamente atribuible a su postura de trabajo.

3. Lesiones previas o actuales

Las lesiones en el cuello pueden provocar cambios en la mecánica muscular. Esto puede resultar en un tono muscular elevado como mecanismo de protección.

Mecanismo fisiológico: Cuando se produce una lesión en el cuello, como un esguince cervical, latigazo cervical, o una distensión muscular, el cuerpo automáticamente incrementa el tono muscular en la región afectada. Esta respuesta muscular, conocida como espasmo muscular, actúa como un mecanismo defensivo para inmovilizar el área y prevenir el agravamiento de la lesión.

Músculos afectados:

• – Músculos paravertebrales: Estos músculos pueden volverse rígidos y dolorosos en respuesta a una lesión.
• – Escalenos: Estos músculos laterales del cuello también pueden experimentar un aumento en el tono muscular para limitar el movimiento y proteger contra el dolor y el daño adicional.
• – ECOM: Este músculo puede estar afectado, especialmente si la lesión involucra una rotación o flexión forzada del cuello.

Caso de estudio: Imagina que Laura sufre un latigazo cervical producido por un accidente de coche. Inmediatamente, experimenta dolor y una notable disminución de la movilidad. La evaluación muestra un aumento significativo en el tono de sus músculos paravertebrales y escalenos, una reacción protectora que su cuerpo ha adoptado para minimizar el movimiento cervical.

4. Uso repetitivo y fatiga muscular

La falta de descanso o un uso repetitivo y prolongado de los músculos del cuello, como en actividades laborales o deportivas, puede causar que los músculos permanezcan en un estado de contracción ligera incluso en reposo. 

Mecanismo fisiológico: Cuando los músculos se utilizan de manera repetitiva o se mantienen en tensión durante largos períodos sin descanso adecuado, pueden desarrollar un estado de tensión crónica conocido como fatiga muscular. Esta condición se caracteriza por la acumulación de productos de desecho metabólicos, disminución del flujo sanguíneo y reducción de la eficiencia muscular, lo que puede llevar a un aumento del tono muscular en reposo como mecanismo compensatorio.

Músculos afectados:

• – Trapecios superiores: Son comúnmente afectados por actividades que requieren elevación constante de los hombros o movimientos repetitivos del brazo, como trabajar con ordenadores o en líneas de montaje.
• – ECOM: Este músculo puede volverse excesivamente activo y doloroso en personas que utilizan con frecuencia movimientos de rotación de la cabeza o que mantienen la cabeza en una posición inclinada, como al usar teléfonos móviles o al conducir.
• – Escalenos: Encargados de ayudar en la respiración y en la inclinación y rotación del cuello, estos músculos también pueden sufrir de uso excesivo en actividades que implican respiración laboriosa o posiciones forzadas del cuello.

Caso de estudio: Pedro, un diseñador gráfico, pasa largas horas frente a su estación de trabajo, a menudo encorvado sobre su escritorio con los hombros tensos y la cabeza proyectada hacia adelante. Después de varios meses, comienza a experimentar dolor persistente en el cuello y una sensación de rigidez. Su evaluación electromiográfica revela un tono muscular significativamente elevado en sus trapecios superiores y en el ECOM, resultado directo de la postura inadecuada y el uso excesivo.

5. Desequilibrios musculares

El desequilibrio entre los músculos del cuello y los hombros, donde algunos músculos son más fuertes y otros más débiles, puede causar compensaciones y un aumento del tono en ciertos músculos para mantener la estabilidad. 

Mecanismo fisiológico: Un desequilibrio muscular se desarrolla cuando un grupo de músculos se vuelve dominante sobre su contraparte antagonista, generalmente debido al sobreuso, una postura deficiente, o una rehabilitación inadecuada tras una lesión. Esta dominancia puede provocar que los músculos más fuertes se vuelvan crónicamente muy activos, mientras que los músculos opuestos se debilitan, alterando así la biomecánica normal y la sinergia muscular.

Músculos afectados:

• – Músculos Suboccipitales: Pueden volverse excesivamente activos debido a posturas prolongadas de inclinación de cabeza hacia adelante (como mirar pantallas), causando dolor y rigidez en la parte posterior del cuello.
• – ECOM y Escalenos: Estos músculos pueden exhibir tono excesivo como resultado de compensar una postura pobre y una alineación cervical incorrecta.
• – Músculos extensores: Con frecuencia se debilitan en individuos con postura de cabeza adelantada, lo que a su vez aumenta la carga sobre los flexores del cuello para mantener la cabeza erguida.

Caso de estudio: Ana, una editora de textos, ha desarrollado un patrón de dolor y rigidez en su cuello después de años trabajando largas horas en su ordenador. El examen con electromiografía revela que tiene un exceso de tono en sus músculos suboccipitales y ECOM, mientras que sus músculos extensores del cuello están notablemente debilitados. Este desequilibrio contribuye no solo a su incomodidad diaria sino también a una disminución de la movilidad cervical.

6. Condiciones neurológicas

Enfermedades neurológicas como la distonía cervical pueden causar contracciones musculares anormales y sostenidas en los músculos del cuello, aumentando el tono basal. 

Mecanismo fisiológico: Las condiciones neurológicas que afectan el control motor, como la enfermedad de Parkinson, esclerosis múltiple, o un accidente cerebrovascular, pueden provocar disfunciones en los nervios o en las áreas del cerebro que controlan los músculos. Esto puede resultar en un aumento del tono muscular (hipertonía), donde los músculos permanecen involuntariamente contraídos y rígidos. Esta rigidez no solo es incómoda, sino que también puede limitar severamente el rango de movimiento y afectar la calidad de vida del paciente.

Músculos afectados:

• – ECOM: Estos músculos pueden volverse rígidos y provocar una postura torcida del cuello o dificultades para girar la cabeza.
• – Escalenos: Pueden presentar un tono elevado que contribuye a la rigidez y dolor en el cuello, afectando la respiración y la postura.
• – Trapecios: Su hipertonía puede conducir a una postura elevada y tensa de los hombros, generando dolor y disfunción.

Caso de estudio: Imagina a Carlos, un paciente que sufrió un accidente cerebrovascular leve hace seis meses y que ha estado experimentando una rigidez significativa en su cuello. La evaluación revela que tiene un aumento en el tono de los músculos ECOM y escalenos, que le dificulta girar la cabeza y afectan su capacidad para realizar actividades diarias como conducir o mirar alrededor.

Tratamientos para el exceso de tono muscular

Tu manejo de las lesiones cervicales y el exceso de tono muscular asociado podría incluir:

• – Terapia Manual: Técnicas como masajes suaves, movilizaciones y manipulaciones cuidadosas pueden ser efectivas para reducir el tono muscular, aliviar el dolor y mejorar la movilidad.
• – Modulación del dolor: Uso de terapias como neuromodulación o la radiofrecuencia para reducir el dolor y los espasmos musculares.
• – Ejercicios: Implementación de un programa de ejercicios cuidadosamente diseñado para fortalecer y estabilizar la columna cervical, mientras se restaura la amplitud de movimiento normal. Estos ejercicios deben ser progresivos y ajustados según la tolerancia del dolor y la capacidad funcional del paciente.
• – Educación postural: Modificar la postura para conseguir un trabajo muscular más eficiente puede reducir la tensión en los músculos cervicales.
• – Terapia farmacológica: Uso de medicamentos que ayuden a reducir el tono muscular, como relajantes musculares o agentes antiespasmódicos, administrados bajo supervisión médica.

Conclusiones

Si tu paciente experimenta tensión constante en el cuello puedes usar la electromiografía para diagnosticar un exceso de tono basal en reposo.

Incorporar estos puntos en los informes fisioterapéuticos no solo ofrece una base más rica para la comprensión del estado del paciente, sino que también guía las intervenciones terapéuticas. 

Al abordar la causa raíz del aumento del tono muscular en los músculos cervicales, podrás mejorar efectivamente los resultados del tratamiento y ayudar a tus pacientes a alcanzar una recuperación más rápida y sostenible.

Nos vemos en el siguiente post 😉