La imaginería motora es un tipo de entrenamiento y/o terapia durante el cual las personas simulan mentalmente acciones específicas pero sin producir un movimiento real.
Se ha utilizado como un medio eficaz para facilitar el aprendizaje y el rendimiento motor, sobre todo en pacientes neurológicos y en el inicio de la rehabilitación de lesiones músculo-esqueléticas.
Muchos estudios sobre este tema han destacado que el entrenamiento con imaginería motora tiene un efecto positivo en el control motor, aunque el grado de efectividad varía en función de los profesionales que lo pautan, el tipo de tarea, el nivel de experiencia de los pacientes, la duración y otros factores.
?? Consejo: La combinación de imaginería motora y preparación física es tan eficaz, o incluso más eficaz, que ambas por sí solas (p. Ej., Hall et al., 1992; Liu et al., 2014; Bajaj et al., 2015).
Por lo tanto, estos hallazgos muestran que el entrenamiento de imágenes motoras puede ser un tipo efectivo de entrenamiento cognitivo como complemento de la práctica física para mejorar los resultados motores.
Errores imperdonables de la imaginería motora ⚠️:
1️⃣ Pensar que el paciente va a confiar en los resultados.
Muchos pacientes desconfían de esta terapia porque no notan nada y finalmente abandonan la rehabilitación o cambian de profesional.
Utiliza variables objetivas para destacar los cambios positivos que está teniendo durante la sesión. Algunas de las variables que puedes usar son:
- El rango de movimiento o la fuerza pre y post intervención.
- La actividad muscular durante la imaginería para comprobar si hay algún cambio.
Mira este ejemplo ? donde medimos con electromiografía los cambios durante un entrenamiento con imaginería en el bíceps braquial.
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2️⃣ No individualizar para cada paciente.
Dickstein et al. compararon la actividad muscular de 6 pacientes hemipléjicos y 9 sanos en un ejercicio imaginario de ponerse de puntillas.
En 6 personas la actividad muscular cambió durante la tarea de imaginería. En el resto NO.
Como ya mencionamos al principio del post, la imaginería es dependiente de muchas variables. La actividad muscular puede a veces, pero no siempre, cambiar durante la práctica de imaginería motora tanto en personas sanas como en pacientes con lesión.
Pero si no lo mides, tu paciente y tú podéis estar perdiendo el tiempo ⏱️. Y ya sabes que esto implica peor satisfacción para él.
3️⃣ No medir el progreso entre sesiones.
Después de un tiempo de terapia, mide el progreso de tu paciente y enséñale su evolución.
Si existe una mejora se alegrará y si no la hay, te agradecerá que te preocupes de medirlo. Recuerda ?♀️ que no todas las terapias funcionan con todos los pacientes.
Cuando mides los resultados de un entrenamiento tienes la oportunidad de tomar decisiones sobre otras terapias que puedes usar en caso de que no funcione.
Aquí tienes un ejemplo de la evolución de la actividad muscular de un paciente desde el día 1 al día 2.
4️⃣ Afirmar que todos los músculos van a responder igual a la imaginería motora.
De nuevo, si no mides cada músculo diana que quieres trabajar con la imaginería, puedes estar perdiendo el tiempo.
Fíjate en este otro ejemplo. El paciente pensaba en un ejercicio de ponerse de puntillas. Sin embargo, mientras que el peroneo corto si se activa, el tibial anterior no tiene ningún cambio.
Ten en cuenta estos resultados para decidir si quieres continuar con la tarea o buscas otra más específica para el tibial.
Las claves finales sobre la imaginería motora …
La ciencia está llena de terapias y ejercicios ? que ayudan a mejorar a tus pacientes y una de ellas es la imaginería motora.
Y aunque es una técnica fácil y asequible de ejecutar, sus resultados pueden depender de la experiencia del paciente y el profesional o el tipo de tarea ⚠️.
Pero, por muy bien que se te pueda dar aplicarla, la realidad es que no es suficiente para lograr el éxito con tus pacientes. Porque si quieres aplicar bien la imaginería y convencer al paciente de que es lo mejor para él, debes de tener en cuenta la respuesta muscular para demostrar su progreso, conocer si está funcionando y motivar al paciente para que haga lo más difícil: repetirlo cada día.
Estás un paso más cerca de dominar la base de todo movimiento: la actividad muscular ?.
